lunes, julio 17

Letras

Los dos hemos caído,
yo te he empujado a ti,
y todo me ha pasado a mí,
los dos hemos sufrido,
pero tú sigues ahí...
y ya casi ni te acuerdas de mí,
desaparezco en mí,
y tú también en ti,

Los dos hemos vivido la desesperación
es una herida, que duele en el corazón
he de poner mis labios sobre tus labios
para poder acariciarte sin dolor,
tú sabes que te quiero,
siembro estrellas en el suelo
como un gallo al andar

Te quiero, y no quiero que te vayas de mí
te quiero, y no puedo respirar sin ti
tu amor me hace daño... pero no quiero vivir
si no puedo sentir.. tu calor... junto a mí.

Como un ángel caído... grito por tu amor
pero no hay nadie alrededor
tu piel es pálida, como la piel de Dios
pero hace daño, si te acercas... como yo...
desaparezco en mí, y tú también en ti...
ya todo acaba aquí... pero yo...

Te quiero, y no quiero que te vayas de mí
te quiero, y no puedo respirar sin ti
tu amor me hace daño... pero no quiero vivir
si no puedo sentir.. tu calor... junto a mí.

3 comentarios:

Helena dijo...

Sé que no nos conocemos, pero...¿tú estás bien?. Tanta tristeza...Imagino que además de escribir necesitarás hablar y olvidar. Sé que no es fácil, pero has probado lo de "un clavo saca otro clavo". A veces funciona.

Pin Pop dijo...

Helena:
Has hecho la pregunta que más he necesitado que me hagan en estos días, y curiosamente viene de alguien que apenas conoce un trocito de mi, quizá por eso te lo agradezco infinitamente.

No estoy bien, nada bien, los esquemas de mi vida desaparecieron, un sunami inmenso me ha arrancado lo mucho o lo poco, pero lo unico que consideraba mío.

Ya no es mío y no se que duele más, si el hecho o la mentira. Supongo que al final duelen los dos.

Lo que llevó muchos años en construirse supongo que tardará un tiempo en reponerse, aunque nunca será igual. Desafortunadamente perdí, y no tengo más que aceptarlo, quizá llore un un río, quizá me rompa aún en miles de pedazos, pero creeré firmemente que todo en esta vida pasa por algo.
Siento conocerte en esta época tan árida dónde no tengo más que tristezas a flor de piel.

Espero, como siempre espero, que los días soleados y lluvia serena lleguen.

GRACIAS, TODAS.

Helena dijo...

Soy consciente de que poco puedo hacer...y aunque no creo haber sentido ese dolor, me puedo hacer una idea...te lo aseguro, porque lo he rozado. Tardará, eso sí, pero volverás a sonreir...eso también es seguro.